El potro de las familias Montenegro y Cuevas al cuidado de Santiago Córdoba, y que condujo con su simpleza acostumbrada, Denilson Venialgo, desde que el starter dio la orden, siempre tubo el absoluto control de la disputa.
Largó mejor y se mantuvo al tope de la disputa con gran destreza para sumar una estrella mas para el stud Doña Julia, lugar donde se cobija el pingo.