El comienzo del caballo de Cabral, había sido realmente caótico y quedando muy atrás de una Preta Bonita que por la diferencia que sacaba en los metros iniciales parecía que sería inexpugnable.
Pero Igor Silva Furtado, jockey de TILIN, no dio por perdido lo que parecía tal, y fue a buscar.
Promediando la disputa las diferencias se achicaban considerablemente y en la parte final, el caballo al cuidado de José Acuña lo dio vuelta de manera admirable demostrando que no hay que dar nada por perdido si hay un hilo de esperanza