Era punto para la catedrática pero su propietario y los seguidores del stud «El Mangal» le tenían un fe ciega al pingo.
Pese a que se corrió en penumbras totalmente a oscuras nuestras cámaras captaron las incidencias de la carrera que dominó de punta a punta el caballo tutelado por Nicolas Lopez para con su andar, iluminar el Coloso Mesopotámico, y dejar en claro que no hay fija que no se doble.